Una Noche Fría

Era una noche, pero no una como cualquiera otra, era una noche fría de noviembre. Merry Jones había desaparecido luego de salir a jugar con sus amigos.

Todo era un misterio, la extraña desaparición de Merry había prendido las alarmas por toda la aldea de “Betan” y habian causado que dos chicos de la misma edad de ella Investigaran por su lado. Jughead y Ruby, tenían una pasión por los misterios e investigaciones y por ello sacaron a flote su lado detectives comenzando a hacer sus propias averiguaciones.

La desaparición de Merry se sumaba a la de tres chicos más que habian desaparecido un par de semana atrás. Uno de ellos, había sido encontrado muerto en un paraje bajo extrañas circunstancias. Jughead y Ruby, tomaron muestras del cadáver de ese chico y todo lo que arrojaron los análisis eran residuos de una sustancia venenosa. Pero lo que era más extraño aún era por qué ese muchacho había consumido dicha sustancia a sabiendas que le causaría la muerte.

De dicha sustancia surgió una pista importante, la cual revelo una gran verdad y esta se convirtió en pieza clave para resolver el misterio. Jughead y Ruby descubrieron que la desaparición de los chicos y el cadáver encontrado tenían su origen en la práctica de un juego, un simple juego nada más.

Era la puerta a la muerte – “el laberinto peregrino” -, un extraño juego de rol que tenía su lado macabro y el cual varias décadas atrás había sido inventado por una habitante de la aldea llamada Penélope Keller. Ella, albergaba un gran resentimiento contra sus vecinos, producto de la muerte de su hermana menor ocurrida hacía varios años mientras jugaban dicho juego en compañía de los niños y jóvenes de aquella época.

Penélope, los culpaba porque en su momento ellos no le ayudaron a salvar la vida de su hermana y fue así como creció con ese sentimiento oscuro en el corazón. Esto la llevo a atraer a los chicos de la aldea con el pretexto de enseñarles dicho juego y poder así vengarse de los padres de ellos y quienes hacían parte de esa generación pasada a la que culpaba de la muerte de su amada hermana.

Jughead y Ruby lo relacionaron todo y querían desenmascarar a la malvada Penélope, pero no era fácil, ya que ella vivía bajo la fachada de ser una buena persona. Para poder descubrirla tuvieron que tramar un preciso y elaborado plan.

Ruby y Jughead, decidieron entrar hasta la mansión de aquella mujer. Al entrar al lugar se llevaron una gran sorpresa. Merry Jones no estaba muerta, aquella mujer la tenía prisionera. Penélope la mantenía con vida ya que quería hacer sufrir a la madre de Merry, ya que ella tenía un collar que era muy importante para Penélope. Un collar que había sido de su fallecida hermana y el cual lo quería tener de vuelta a como diera lugar.

Los chicos liberaron a Merry. Aprovechando un descuido de Penélope.  Iban a intentar escapar pero en ese preciso instante ella descubrió que Merry no estaba. Eufórica, Penélope empezó a buscar por todos los rincones de la mansión, ya que ella sospechaba que Merry aun se encontraba allí.  

Ruby, accidentalmente tropezó rompiendo un jarrón, delatando así en que parte de la casa de encontraban.  Ellos se encontraban en la cocina buscando salir por una puerta que conectaba a un patio trasero. Penélope llego y sujeto a Ruby con la intención de arrojarla a un viejo horno de carbón el cual ella mantenía siempre encendido.

Al ver a Ruby en peligro, Jughead forcejeo con Penélope con tan mala suerte para esta que termino cayendo en su propio horno muriendo ella junto con su odio y oscuridad.

Las autoridades de la aldea revisaron la mansión encontrando en su sótano a los otros dos chicos. Solo uno de ellos murió y era aquel cuyo cadáver habian encontrado hacia unas horas. Los planes de Penélope eran ir asesinando uno a uno a esos muchachos envenenándolos de la misma forma como había matado al primero de ellos, dejando por último a Merry e intentar recuperar con ella el collar de su hermana.

Todo esto transcurrió en una fría noche de noviembre, una noche similar a la que años atrás la hermana de Penélope murió, y el odio y el deseo de venganza de ella habian nacido.

Con la muerte de Penélope la paz volvió a “Betan” pero la vida de sus habitantes jamás volvió a ser igual.

AUTORA: LUISA FERNANDA RODRÍGUEZ BLANQUICETT (COLOMBIA)
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