Mi nombre es Ashley, desde pequeña he tenido una buena vida…bueno hasta que llego este día. Era martes el día estaba lluvioso, pero justo hoy me tocaba ir a comprar muebles para nuestra nueva casa ya que hace poco nos habíamos mudado a una nueva…
-Dios estoy tan exhausta, siento que se me partirán mis piernas –
Ya era tiempo de volver a casa, la noche se hacía profunda con las horas que pasaban, así que volví ya que al fin había pedido los muebles que faltaban. Llegue a casa muy cansada así que fui y tome un baño caliente, después de ese largo baño me puse mi pijama y me fui a la cama. Empecé a soñar algo raro. Estaba en una habitación amarilla con un olor a humedad que estaba en todos lados.
Aquel cuarto era muy parecido a un laberinto, pero este era más espeluznante, este parecía una simulación – algo que parecía un juego y alejado totalmente de la realidad… empecé a caminar poco a poco por el lugar y más deteriorado y tenebroso se ponía. Las señales de advertencia y las flechas querían que llegase a algún lugar de ese cuarto, no sabría si me estaban guiando hacía la salida o a una trampa… de repente, justo llegando al final, vi la figura más horrible que he podido presenciar. Era alta, como de dos metros… su piel amarilla, muy deteriorada y parecía que se le estaba derritiendo su rostro, como cuando una vela se derrite. Me quede en shock mientras ese espeluznante monstruo se acercaba a mí… no sabía si dejar que me atacara o correr… mi cabeza se llenó de las peores escenas que se puedan imaginar Talvez esa cosa me mate y llegara a despertar en la realidad o jamás despertar… Tuve que correr, no podía imaginar lo que pasaría si esa cosa me mataá en este sueño… corrí tanto que me topé con una puerta entre abierta que deslumbraba una luz roja y sobre ella un signo de exclamación ¨ ¡¨, no lo tenía que pensar y solo entre en ella…
NIVEL 2 – CORRE POR TU VIDA
Era un hospital, pero solo desplegaba esa luz roja nostálgica, el lugar estaba desordenado tenía muchas camillas por todos lados y basura tirada, el lugar era un pasillo muy largo que tenía demasiadas puertas a sus lados, pero lo extraño es que tales puertas tenían un letrero con la palabra SALIDA. Empecé a caminar por el lugar… el tiempo cada vez más eterno parecía… mientras caminaba sentí la presencia de algo a mis espaldas…
– no puede ser – ¿será aquel monstruo que observe hace rato?
Hasta que lo vi, una multitud de espectros me estaban siguiendo… corrí con todas mis fuerzas, pero lo más sorprendente era que esas cosas se acostumbraban a mi velocidad… pude vislumbrar una puerta a lo lejos, era igual a las otras, pero era la única cambiada de posición, uno de esos monstruos logró agarrar mi pierna y me arrastro hacia él… intento arrancarme mi rostro con su enorme mano, pero, gracias a Dios vi una baranda en una pared, estiré mi brazo y pude alcanzarla… como pude le cause una herida en su ojo y corrí. Era tanta la sangre que caía de mi rostro que no pude correr más…
¡oh Dios, me iba a desmayar? –
No podía permitirlo, estaba tan cerca de escapar, estaba a punto de lograrlo, me lance hacía la puerta y salí… pero… ¿Cuántos de estos son?, esto parecía infinito… ¿cuánto tiempo estaré aquí? — Solo espero volver a despertar…
AUTORA: SARA RODRÍGUEZ RAMÍREZ (COLOMBIA)
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Soy Sara Rodríguez Ramírez (Colombia), tengo 13 años, estudio en el Colegio Liceo Superior Juan Pablo II en la ciudad de Cali (Colombia) y mi pasatiempo favorito es dibujar.
