SERENDIPIA DOMINICAL – Columna de la escritora española Mónica Miquel Nieto – Encuéntrala cada domingo en el portal web (escritoresrebeldes.com) y en las redes sociales de Escritores Rebeldes.
SERENDIPIA DOMINICAL
EL GRAN APAGÓN
Por: Mónica Miquel Nieto (Barcelona – España)
Correo electrónico: mmiquelnieto@gmail.com
El apagón que sufrió la Península Ibérica el pasado 28 de abril ha generado muchas noticias y especulaciones sobre los posibles motivos que lo causaron. La corriente eléctrica se interrumpió a las 12:33 h de la mañana y durante el mediodía, la tarde y parte de la noche se realizaron trabajos para recuperar la electricidad, que regresó de forma gradual a todos los lugares de la península.

En este Serendipia dominical no pretendo centrarme en las causas del problema, sino más bien en las sensaciones y emociones que provocó el apagón en la población española.
Los ciudadanos se miraron a los ojos y charlaron de forma desenfadada. Algo que hacía mucho que no sucedía se consiguió gracias al apagón y a la desconexión digital momentánea.
En un primer momento, las personas se mostraron sorprendidas, desorientadas, algunas preocupadas o atemorizadas. Todo ello fue causado por un fenómeno no habitual: el apagón eléctrico y de Internet, al cual no estamos acostumbrados y a la falta de información inicial.
A medida que fueron pasando las horas, fuimos conscientes de nuestra exagerada dependencia energética y del fabuloso recurso de Internet. Tuvimos problemas para pagar, por la ausencia de dinero en efectivo, para comunicarnos con nuestros seres queridos, por no disponer de móviles, para informarnos, ya que muy pocos tenían radios que funcionaran con pilas, para subir y bajar en ascensor, para ver en casa (algunos no disponían de velas o linternas)… Además, muchos negocios tuvieron que cerrar, puesto que no funcionaba el pago con tarjeta.
Por otro lado, a nivel de transporte público, se dieron muchos problemas. Infinidad de pasajeros se quedaron atrapados durante el trayecto, tanto en trenes como en vagones de metro.
Al pasear por la calle, te cruzabas con caras preocupadas, quizás por no tener noticias de algún familiar obligado a utilizar el transporte público para volver a casa, desde la universidad o desde su puesto de trabajo. Estamos acostumbrados a mantener un contacto casi constante con las personas que son importantes para nosotros, pero al no funcionar la comunicación vía móvil, eso resultaba imposible.
La sensación general era la de sentirse desvalido y sin saber qué hacer.
En esa situación, muchos ciudadanos decidieron organizarse y ayudarse. Algunos salieron a la calle para compartir su radio a pilas con los vecinos e informarse en buena compañía. Otros se aparcaron en la mesa de alguna terraza con amigos o compañeros de trabajo y decidieron dedicarse a charlar, tomar unas copas y comentar la jugada.
Los músicos de barrio se animaron a bajar con su guitarra y algunos improvisaron alguna actuación. Personas cantando y bailando en reuniones callejeras improvisadas hicieron que regresara la alegría.
De todo se aprende en la vida, así que intentaré compartir algunas reflexiones útiles con todos vosotros después de haber vivido el dichoso apagón peninsular. Aquí van:
1. La perfección no existe, las cosas pueden fallar y debemos adaptarnos en caso de que eso suceda.
2. Debemos disponer de dinero en metálico por si las moscas.
3. No va mal tener una radio que funcione con pilas en casa.
4. Todo hogar o local debería disponer de velas o linternas en caso de apagón.
5. No es necesario tener el congelador y la nevera repletos de alimentos.
6. Es útil hacer acopio de latas y alimentos que no requieren ni nevera ni ser cocinados.
7. Puede sernos útil disponer de un fogón de càmping que no funcione con electricidad.
8. Se puede vivir sin Internet, antes se hacía. Incluso puede llegar a ser divertido.
9. Existen unas cosas llamadas libros, que pueden leerse con luz de día.
10. Si hay un apagón no es indispensable comprar papel higiénico ni correr a vaciar las estanterías de los supermercados.
11. La comunicación y la información constantes no son imprescindibles.
12. Los transportes públicos, los ascensores, las empresas y los gobiernos deberían tener un plan de actuación preestablecido en casos como el que se dió el día del apagón.
13. Deberíamos potenciar la comunicación entre las personas, mirarnos a los ojos, interesarnos por sus vidas, colaborar, ayudarnos, charlar.
14. No tener toda nuestra vida metida en el móvil. No depender de él para todo.
15. Las cosas pueden fallar, debemos estar prevenidos por si eso sucede. No debemos buscar culpables, sino soluciones.
16. Hospitales preparados. No puede ser que personas con respirador hayan perecido.
17. Cajeras y cajeros que sepan dar el cambio mentalmente.
18. Utilizar más a menudo los parques o encontrar más gente en la calle es agradable.
19. Mucha gente ayudó a subir sillas de ruedas a pisos elevados…
20. Fue un problema puntual de corta duración, pero si hubiera durado más tiempo los problemas se hubieran multiplicado.
En resumen y como conclusión, debemos mostrarnos capaces de adaptarnos a los cambios y no mostrarnos tan dependientes de la energía y de Internet y las redes sociales.
Nos vemos el próximo domingo, si la tecnología lo permite. Sed felices.
MÓNICA MIQUEL NIETO (BARCELONA – ESPAÑA)
© DERECHOS RESERVADOS AUTORA

Mi nombre es Mónica Miquel Nieto, mujer de 53 años, residente en Barcelona, escritora y poetisa.
Toda mi vida he sido una lectora empedernida, de todo tipo de libros, pero sobre todo de novela histórica, novela fantástica y poesía.
De pequeña gané algunos certámenes literarios y ahí quedó todo. No he dejado de escribir nunca, pero no fue hasta el confinamiento causado por la pandemia de Covid-19, cuando decidí intentar publicar mis obras.
Escribí a algunas editoriales hasta que, finalmente, la Editorial Alvi Books confió en mis posibilidades y se arriesgó a publicar 5 de mis obras. Al ser una persona absolutamente desconocida, es algo que les agradeceré siempre.
Participo en algunos grupos literarios de Facebook y he publicado en algunas revistas (Escritores Rebeldes, Las Alas del Cóndor, CLIVAR, Netrazol Literary Magazine…).
He colaborado con algunos poemas en el canal de meditación de Youtube e Instagram Medita i Respira.
También se han escuchado mis poemas y fragmentos de mis obras en programas radiofónicos, como por ejemplo en La hora de la verdad de TuradioValencia.com, La Enamorada Radio o Radio Alfa Omega de Mexico.
Mi intención es darme a conocer y conseguir lectores para mis obras publicadas. Hay una sexta obra en proyecto.
No dejaré de escribir, porque para mí el hecho de hacerlo, es tanto una necesidad como un placer.